Aumentar la inversión en Colombia, que hoy es de 10.000 millones de dólares canadienses (unos 20,5 billones de pesos) es la tarea que dejó a su equipo diplomático en el país, el gobernador de Canadá, David Johnston, quien habló con El Colombiano durante su reciente visita a la ciudad.
Destacó que además de los actuales frentes de inversión canadiense, encabezado por el negocio minero-energético, donde se destacan petroleras como Canacol Energy y Pacific Rubiales, seguido del negocio financiero, donde se destaca Scotiabank que tiene el 49 por ciento del Banco Colpatria, además del negocio de producción agricultura y de infraestructura, está el de emprendimiento e innovación dado el potencia que tiene Colombia para mejorar su oferta allí.
“Vemos una oportunidad de desarrollo en el negocio de las TIC, también en desarrollo de software y animación digital, dado el talento que existe en Colombia en estos frentes. Sin duda, es importante el avance de ustedes en los programas innovadores”, resaltó el gobernador.
Acompañado por la embajadora canadiense en Bogotá, Carmen Sylvain, indicó que su país le exporta a Colombia 700 millones de dólares canadienses (1,43 billones de pesos) y a su vez Colombia exporta 690 millones (1,41 billones de pesos) a Canadá, lo que significa una balanza equilibrada.
Sin embargo, es de destacar que en el último año se ha notado una diversificación de productos colombianos que se venden a el país del norte, los cuales son unos 200.
“También vemos una oportunidad colombiana en la exportación de servicios, como es el caso de los contac center por la calidad de los colombianos”.
No obstante, indicó que el intercambio entre ambos países va más allá de lo comercial y dijo que si bien la balanza es equilibrada, los programas de cooperación son de gran importancia. “Nos interesa asesorar en esquemas para simplificar procesos en la creación de empresas. Apoyar programas de educación e innovación. Hasta en temas de seguridad vemos una importante alternativa de intercambio”, como ya lo hacen con Migración Colombia.
Además de los programas de educación e innovación está el reto de contribuir con el proceso de paz, especialmente en el postconflicto.